Anakin Skywalker y Ahsoka Tano, regresando de su fallida misión de recapturar el holocrón capturado por Cad Bane, a quien creen muerto, aterrizan en el Resolute que orbita el Sistema Devaron. Tano sigue al soldado clon Denal, quien supuestamente mató a Cad Bane, haciendo preguntas constantemente sin respuesta del clon.
Mientras tanto, Skywalker investiga una gota de sangre verde en el suelo del transbordador en el que regresaron y se da cuenta de lo que realmente paso.
Advierte a Tano, pero ya es demasiado tarde. Cad Bane, disfrazado de soldado clon, le da un fuerte rodillazo en el pecho y corre para escapar.
Skywalker intenta detenerlo saltando sobre el caza, pero Bane desvía la nave hacia el vacío del espacio y se ve obligado a saltar.
Skywalker luego contacta impotente con el almirante Yularen y le dice que desactive los anillos de transporte hiperespacial, pero Yularen tampoco llega a tiempo y Cad Bane escapa.
De vuelta en Coruscant, Skywalker y Tano informan al Alto Consejo Jedi del desafortunado giro de los acontecimientos. Dado que Bane tiene acceso a la lista de todos los niños sensibles a la Fuerza en el holocrón, esa información ahora está en manos separatistas , lo que podría ser desastroso para la Orden. Su única esperanza es buscar a través de la Fuerza para detectar secuestros.
En otra parte, Darth Sidious le ordena a Bane que capture a cuatro niños sensibles a la Fuerza y los lleve a Mustafar; Bane considera imprudente secuestrar inocentes, pero no le importa, siempre y cuando le paguen.
Yoda, Obi-Wan Kenobi, Mace Windu y Skywalker meditan, tratando de detectar a los niños a través de la Fuerza, ya que muchos están siendo eclipsados por el lado oscuro. Skywalker luego se dirige a Naboo para conseguir un niño gungan, y Kenobi a Rodia .
En Rodia, Bane se hace pasar por un Jedi y afirma que debe llevar al niño Wee Dunn a Coruscant; su madre protesta porque el maestro Bolla Ropal insistió en que es demasiado joven para hacerlo; Bane insiste, fanfarroneando que hay Jedi "impostores" deambulando, pero la madre de Wee se niega a dejarlo ir. Bane luego usa un dispositivo giratorio para "relajarla".
Kenobi luego llega a Rodia y se apresura a ir a la casa de los Dunn. Sin embargo, la madre de Wee amenaza a Kenobi con un desintegrador, pero él se lo quita de las manos y exige saber dónde está Bane. Bane luego aparece en la puerta, antes de volar hacia su caza y escapar.
En Naboo, Skywalker y Tano llegan para asegurar al niño gungan Roo-Roo Page .
Esta último va a la ciudad de Jan-gwa para cuidarle. Más tarde esa noche, llega Bane y se infiltra en la ciudad Gungan. Luego se cuela en la habitación de Roo-Roo, sólo para encontrar a Tano esperándolo.
Se involucran en una pequeña pelea antes de que lo capturen; Tano recupera su trenza padawan .
En un crucero clase Venator, Bane se niega a hablar sobre dónde están los otros niños que capturó y los registros de navegación de su barco han sido borrados.
Con Bane como guía, Kenobi y Windu se preparan para ir a buscar a los niños. Windu señala que deben informar al Canciller sobre esto, pero Kenobi insiste en que se trata de un asunto Jedi; Skywalker aboga por contactar con Palpatine.
En Coruscant, Skywalker y Tano informan a Palpatine del complot. Expresa su creencia de que ni siquiera el Conde Dooku está detrás de esto. El Canciller le pide a Ashoak que les deje solos, y le pregunta a Skywalker quién cree que está detrás de esto y él responde que no lo sabe; Palpatine le dice que tenga paciencia.
En Mustafar, Palpatine, como Sidious, que aparece a través de un holograma, les dice a los droides quirúrgicos que preparen la cirugía para los niños. Les dice a los droides que su intención es crear un ejército de espías Sith para abrumar a los Jedi. Si los niños no sobreviven al procedimiento, no habrá perdido nada.
La lanzadera Jedi llega a la estación especificada por Bane, pero los maestros no sienten a los niños.
Bane dice que los niños están a salvo; sólo los llevó al holocrón. Se ofrece a conseguirlo, Windu se niega a dejarse engañar, pero accidentalmente activa los sensores del puente, activando varias torretas. Los Jedi se defienden mientras Bane abandona la estación en una cápsula de escape . Afortunadamente, agarran el holocrón y escapan de la estación antes de que se autodestruya.
De vuelta en el Resolute, Skywalker y Tano revisan el caza de Bane en busca de pistas. Tano encuentra ceniza volcánica en su casco, mientras Skywalker revisa su registro de combustible y determina que Bane había dejado caer a sus rehenes en Mustafar.
Luego salen en el Crepúsculo. Sin embargo, en Mustafar se detecta su acercamiento y Sidious ordena que trasladen a los niños a otro lugar y destruyan las instalaciones.
El dúo Maestro-Padawan ingresa a las instalaciones, atraído por los gritos de Wee. Sin embargo, los droides usan a los niños como escudos mientras luchan contra los Jedi, mientras la instalación se desmorona. Sin embargo, los Jedi lograron arrebatar a los niños de los droides y escapar antes de que toda la instalación colapse en el peligroso lago de lava.
Cuando regresan a Coruscant, Skywalker admite ante el Consejo que no pudieron descubrir quién estaba detrás de los secuestros. Yoda aconseja precaución en el camino a seguir.
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