Con la esperanza de obtener combustible de Malastare, Mace Windu, Palpatine (a través de un holograma) y Anakin Skywalker discuten los posibles efectos de la bomba de electroprotones, la última superarma de la República, preocupados de que la bomba pueda afectar a sus tropas, así como al ejército de droides. La Dr. Sionver Boll, la científico que construyó la bomba, confirma que no dañará a ninguna fuerza de la República ni a la gente de Doge Urus. Sus efectos solo funcionarán en droides y se han asumido todas las probabilidades. Mientras Windu sigue siendo cauteloso ante lo "improbable" y desea encontrar otra forma, Palpatine insiste en que la bomba es la última oportunidad para asegurar una victoria de la República.
Windu y Anakin observan a las fuerzas de la República y Malastare, superadas en número, mientras marchan hacia las fuerzas separatistas que avanzan. Del lado separatista, el droide táctico da la orden de atacar. El capitán Rex , los soldados clon y los soldados Dug y Cavaliers en insectomorfos luchan por mantener su posición, incluso mientras los bombarderos Hyena vuelan por encima.
Finalmente, la República ordena que se lance la bomba de electroprotones sobre la enorme fuerza separatista. El piloto suelta la bomba, aniquilando a las fuerzas separatistas con una explosión masiva.
La explosión es seguida por un pulso electromagnético que corta la energía de la transmisión de Palpatine y los tanques clon, y provoca un cortocircuito en el brazo protésico de Anakin, pero deja a la fuerza clon y a los soldados dug ilesos.
Mientras las tropas celebran su victoria, el suelo comienza a resquebrajarse y hundirse bajo sus pies. Los clones y los dugs huyen con Rex, apenas logrando llegar a la cornisa.
Sin embargo, algunos clones caen en el sumidero y Anakin envía equipos de rescate para localizar a los soldados atrapados. Después de perder contacto con los rescatadores, Mace Windu y el comandante Ponds deciden investigar y buscar a las tropas desaparecidas,
Mientras Anakin ratifica el Tratado para autorizar la compra de combustible de Malastare. El líder de los dugs, Doge Nahka Urus, exclama su felicidad por su alianza mientras esperan que llegue el resto del consejo y ratifique el tratado.
Mientras tanto, Windu encuentra marcas de manos y un casco de clon en el sumidero cuando los clones encuentran al equipo de rescate y algunas de las tropas que cayeron en el agujero; uno de los sobrevivientes traumatizados habla de algo en el abismo con ellos.
Windu, Ponds y los soldados Hawkeye y Trapper comienzan a buscar en otro lugar. Windu le pide a Anakin que baje y ayude. Mientras avanzan hacia una cornisa, Windu y los soldados sienten que el suelo tiembla cuando la enorme cabeza de una enorme criatura reptil se gira y les ruge. Los clones disparan a la bestia sin efecto. Los sacude y los persigue hasta que Anakin lo distrae volando en círculos, lo que permite que Windu y los clones escapen.
Anakin se sorprende y es tomado por sorpresa cuando la bestia golpea su caza y se estrella, eyectándose justo a tiempo.
Golpea al monstruo con su sable de luz, solo para descubrir que sus escamas similares a una armadura son virtualmente impermeables incluso a su sable de luz. Salta sobre la parte superior de la cabeza de la bestia y nota huecos en la armadura por los que un disparo bien colocado podría penetrar antes de saltar sobre R2-D2 y salir disparado del pozo.
Después de hacer su salida sorpresa, Urus llega y explica que la criatura es una Bestia Zillo; eran las formas de vida dominantes en Malastare antes de que su gente se expandiera por todo el planeta y atacara a los primeros Dugs. Urus afirma que cuando su gente comenzó a recolectar combustible, las Bestias Zillo comenzaron a morir. Se creía que se extinguieron... hasta ahora.
Los Dugs bombardean a la Bestia Zillo sin éxito.
Mace y Anakin encuentran a Urus y al consejo observando la antigua escritura que muestra las debilidades de la Bestia Zillo.
Windu y Skywalker argumentan que exterminarán una forma de vida inocente si continúan, pero Urus amenaza con cancelar el tratado si intentan protegerlo.
Una conversación con Palpatine muestra que apoya el exterminio de la Bestia Zillo, pero la Dr. Sionver Boll y Anakin también apoyan la idea de preservarla para replicar su armadura aparentemente impenetrable para uso militar y proponen una idea para aturdirla en los huecos de su armadura usando Tanques Aturdidores. Cuando esté completamente aturdido y debilitado, parecerá muerto, pero seguirá vivo en estasis. Los Dugs asumirán que está muerto y firmarán el tratado, mientras que la República podría moverlo a un lugar seguro antes de que despierte, donde pueden estudiar a la criatura y posiblemente copiar la armadura.
Los tanques aturdidores se dirigen al pozo, donde Urus se alegra de ver que los acontecimientos se mueven a su favor, pero su método ya está funcionando. Ordena a los Dugs que vacíen las líneas de combustible en el pozo. Urus explica que el combustible es letal para la Bestia Zillo y debería matarla, pero Windu advierte que tal acción solo enfurecerá aún más a la Bestia. Windu insta a Urus a detenerse y luego amenaza con matarlo a menos que se detenga, pero el Dug continúa oponiéndose a Windu, afirmando que él también es una forma de vida inocente. Sin embargo, la advertencia de Windu resulta correcta cuando la provocada Bestia Zillo sale del agujero y se descontrola, destruyendo todo a su paso.
Trepa y los tanques aturdidores abren fuego, aparentemente sin éxito. Golpea y destruye varios tanques, lo que hace que Anakin ordene retroceder para evitarlo. Después de un alboroto, el fuego concentrado de los tanques comienza a debilitar a la Bestia Zillo, y finalmente colapsa, incapacitada. Enviada a un coma profundo por los cañones, la bestia parece estar muerta.
Urus firma el tratado y Malastare se une a la República. Palpatine ordena que la Bestia Zillo sea enviada a Coruscant para su estudio, un asunto por el que Windu expresa su preocupación. Cuatro LAAT/cs recogen la Bestia Zillo para llevarla a Coruscant para su estudio.
Este episodio es en gran medida, un homenaje a las peliculas clasicas japonesas de Godzilla. La criatura y su nombre son el guiño mas obvio a la estrella de peliculas de monstruos japonesa. Los detalles mas pequeños incluyen los nombres y los diseños en los cascos de los pilotos de los bombarderos clon, Goji y Rod, que sugieren las semejanzas con Godzilla y Rodan
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